La rejilla electroforjada es un producto muy polivalente, que tal y como hemos comentado en otras publicaciones puede ser utilizado en diferentes ámbitos o sectores, no sólo en instalaciones de tipo industrial. Tanto es así, que hoy vamos a comentar las posibilidades que existen de aplicar rejillas eletroforjadas en el hogar.
Gracias a su durabilidad, resistencia y gran variedad de configuración de mallas, la rejilla se puede utilizar para usos con una finalidad más estética y práctica, como pueden ser los vallados sobre muro, o en otras ocasiones sólo práctica tal y como puede ser un sumidero de recogida de aguas.
Usos de rejilla electroforjadas en viviendas
A continuación, vamos a detallar algunos de los múltiples usos que se le puede dar a una rejilla electroforjada:
- Sumideros: Se define como “orificio, conducto o canal por donde se sumen las aguas de lluvia o residuales”. En el caso de los hogares, podemos encontrar diferentes situaciones. Sumideros en patios o garajes, que normalmente consisten en un hueco cuadrado pequeño que se cubre con una tapa de plástico extraíble. Una de las ventajas de utilizar rejilla metálica por ejemplo sería evitar que los roedores puedan romper la tapa, evitando así que salgan al exterior. En caso de sumideros en garajes, la ventaja reside en que se puede diseñar una que resista el paso de vehículos, evitando así un problema si el sumidero no se encuentra en el centro y no se puede evitar que se ruede por encima de la misma.
- Canaletas: Ya sea en casas unifamiliares con garaje en sótano o en aparcamientos de edificios, la rejilla electroforjada permite que estos huecos sean mucho mayores permitiendo así evacuar mucha más agua en el caso de lluvias abundantes. Podemos encontrar otros productos diferentes a la rejilla metálica que sean aptos para este uso pero el hueco a realizar debe ser mucho más pequeño, por lo que el riesgo de desborde será, en consecuencia, mayor. La rejilla se puede quitar fácilmente por lo que las tareas de limpieza no supondrán dificultades respecto a otros productos.
- Balcones: Ya sean las barandillas de los mismos o el propio suelo, aportando otro aspecto a los edificios. Para el suelo se puede optar por una rejilla con la malla muy tupida o colocar encima madera o chapa metálica, para reducir la sensación de vértigo.
- Vallados: En este apartado tenemos que mencionar la rejilla de ocultación y semiocultación, ya que son las que más privacidad ofrecen sin tener que colocar otros elementos como setos o cañizo, por ejemplo. Este tipo de vallados se puede colocar tanto en muros de jardines como para cercar una terraza a modo de barandilla. También se puede optar por una rejilla “clásica”, como el típico vallado de colegio o nave.
- Barandillas y escaleras: Aquí podemos poner como ejemplo una escalera de acceso a terraza, sin necesidad por lo tanto de realizarla de obra y pudiendo aprovechar mejor el espacio bajo la misma. Al mismo tiempo, si el patio tiene una superficie reducida, visualmente no se recargará en exceso y se podrá tener una sensación de mayor amplitud.
- Rejillas para ventanas: En este uso sí estaríamos ante una aplicación más práctica que estética, sobre todo si lo comparamos con las rejas de forja, en las cuales son viables muchos más diseños, aunque en consecuencia con esa personalización también habrá un incremento de precio. Respecto a la rejilla electroforjada, las opciones de personalización pasan por la configuración de la malla y por aplicarle pintura del color que más guste.
- Otros usos que se le pueden dar pueden ser mesas de trabajo, puertas para crear cuartos de almacenamiento o estanterías, entre otros. Como se puede comprobar, son muchos los posibles usos de la rejilla electroforjada y en esta publicación sólo estamos hablando de aplicación en el hogar.